Pueden haber muchas razones para decidir no dejar a su pareja abusiva
- Usted desea que sus hijos se críen con un padre
- No quiere perder su hogar
- No quiere que sus hijos se cambien de escuela
- Usted es indocumentada y no quiere arriesgarse a ser deportada
- No quiere traerle vergüenza ni a usted misma, su pareja o a su familia
- Tiene miedo de estar sola
- Usted ama a su pareja - y otras razones que sólo usted conoce
- Tiene miedo de perder la custodia de sus niños
- Es en contra a sus creencias religiosas.
Todas estas consideraciones son reales. Solamente usted es la que sabe qué tan peligroso es el maltrato o abuso que enfrenta. Sólo usted puede juzgar cuándo el dolor o el peligro es "demasiado" y pesa más que sus razones para quedarse.
Cuando esté pensando si marcharse o quedarse, pregúntese
- ¿Son mis razones para quedarme lo suficientemente importante que vale la pena arriesgarme a ser golpeada o asesinada?
- ¿Hay menos posibilidad de ser herida o asesinada si me quedo o si me voy?
- ¿Qué le está haciendo el abuso a mis hijos y a sus futuras relaciones?
- ¿Qué quiero ser y dónde quiero estar de aquí a cinco años?
- ¿Cuál curso de acción tiene más probabilidad de llevarme a esa meta?